RESEÑA POR RODRIGO VILLALOBOS / 19 DE MARZO 2020
Pocas veces los ambientes cohabitan adecuadamente. La cultura se nos esconde a veces en fechas y horarios impuestos a fuerza de romper con nuestras agenda. Casi siempre se nos impone, día a día, situaciones cada vez más "normales" y asociamos la rutina con el 'confort'. Ocurre que Café León (que se ubica en la 9 calle y 8va. Avenida del Centro Histórico capitalino) nos ha demostrado recientemente -y una vez más- cómo se rompen los márgenes de "la normalidad" en su atmósfera como antesala al fin de semana.
Brendy Boj quien abrió el concierto, como solista, durante su interpretación en «Café León».
Un brevísimo, pero exquisito momento, se extendió por todo Café León de la mano de Brendy Boj y Patrice Fisher el día viernes 15 de marzo. Se trata de dos increíbles artistas con un dominio singular en el uso del arpa. Su concierto, que inició de imprevisto y sorpresivamente a las 17 horas, deleitó a decenas de personas presentes en dicho café y centro cultural.
Una tarde ordinaria en compañía de amigos y familia se transformó repentinamente en un recital muy singular. Las piezas que fueron interpretadas por ambas arpistas iban de lo popular a ejercicios sumamente elaborados. La destreza de ambas artistas engalanó la tarde robándose los aplausos con tan llamativos instrumentos de cuerdas.
Patrice Fisher y Brendy Boj durante su magnífica ejecución a dos arpas en el vestíbulo del ingreso de «Café León».
Café León demuestra así que se ha vuelto un referente cultural, un punto clave en la formación de ciudadanía y un refugio de artistas nacionales con diversidad de propuestas.
Increíblemente, el público y clientes de dicho espacio se comportaron a la talla de cualquier tipo de audiencia de concierto por más de una hora y quince minutos. Esto también es vital para el crecimiento de los artistas que acuden con su propuesta a este recinto; se percibe un respetuoso recibimiento a quienes tienen siempre algo que decir o mostrar.
Patrice Fisher y Brendy Boj en una de las últimas piezas que presentaron durante su interpretación a dos arpas.
Nuevamente, una felicitación a tan maravilloso entretenimiento. El aporte de ambas arpistas y la complicidad cultural de Café León muestran lo importante que es abrir espacios de este tipo en nuestro entorno social, aún cuando se tiene la noción de que los fines de semana la gente no acude a este tipo de eventos.
Fotografías: Rodrigo Villalobos.
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