Virgen de los Reyes "La Inmaculada Concepción" fotografìa de De Cheal 12 - Trabajo propio, CC BY-SA 3.0. |
Cuando una obra trasciende fuera
del recinto religioso y llega
a impactar en otras regiones
se puede decir que su popularidad es efecto exclusivo de
esa influencia. Y esto ocurre porque existen causas identificables para que
una imagen llegue a ser un símbolo de
diferentes lugares, tiempos y
generaciones.
Ejemplo
de ello es la
Inmaculada Concepción. Este
es un dogma de fe, que en la República de Guatemala se
le ha dado gran importancia. Sigue siendo tan importante que basta emigrar a
otros lugares del país para entenderlo.
Este dogma, dentro del catolicismo, afirma que Dios crea a
María, madre de Jesús, sin pecado original. Este hecho causaba
gran problema, para los teólogos,
pues
unos estaban a favor
y otros en contra. Durante
muchos siglos esta disputa teológica logro
formar diferentes posturas. Con la
declaración del dogma, como verdad
de fe, todos terminaron por aceptarlo y creerlo.
En la historia
En el territorio que comprende actualmente la República de Guatemala, se pueden distinguir
varias acciones por la
defensa de esta creencia.
Primero los votos
de 1617, que dan origen al rezado del 8 de diciembre;
los juramentos llamados de
sangre (las personas decían creer
este hecho y dar la vida
si era necesario), el más llamativo es el voto y juramento de 1654.
También el Hermano Pedro (residente de Antigua Guatemala y canonizado en 2002) fue uno de los
que también firmaban y propagaban
esta creencia.
Diferentes grupos
hicieron votos y juramentos
para defender y propagar
la devoción a la Virgen sin mancha de pecado. Destaca la Universidad de San Carlos de Borromeo, el Ayuntamiento y
otros gremios que la juraban por
patrona. También la tradicional quema del diablo es
un símbolo de la propagación y defensa
del dogma (en la actualidad han intentado eliminar esta
costumbre para evitar la
contaminación ambiental).
Imposiciòn de la Orden del Quetzal a la Virgen de los Reyes, Imágen de Cheal 12 - Trabajo propio, CC BY-SA 3.0. |
En el arte
La influencia
de este dogma
se ha multiplicado con la hechura de
imágenes religiosas que intentan reflejar la
devoción del pueblo cristiano a la Virgen María. Esto es notorio en
la fabricación de imágenes que intentan
copiar a dos esculturas
de gran trascendencia: la
Inmaculada de Catedral y la de San Francisco. Estas
han sido objeto de gran veneración durante muchos, muchos años.
Tanto es así que se les
han adjudicado leyendas.
A la primera
el haberle llamado “Primera
Dama de la Nación”, cosa que es muy poco
probable se diera en 1857. Dirigirse a la esposa
del presidente con ese título es más
reciente. A la segunda el haber
sido el motivo de la creación de
la actual bandera del país, del
primitivo himno de Guatemala entre otros.
Es propio
por tanto decir que la
influencia ejercida en la devoción a
la Inmaculada, es causa de creación de nuevas obras de
arte, pinturas entre otros.
Destaca en Izabal el uso de la imagen de
serie, para colocarlo en las diferentes parroquias, como un signo
devocional a la patrona.
Este tipo de imagen está
basado en las pinturas de
Murillo, donde se observa
a la Virgen con las manos hacia su pecho y la
mirada a lo alto.
Muy parecido a la Inmaculada Catedralicia.
En conclusión, La
Inmaculada es un dogma
de fe cristiano, que en Guatemala
ha tenido un fuerte
auge. El arte continuamente
expone obras de
este tema y los libros
de historia reflejan la
necesidad de las personas por plasmar
su creencia en las diferentes
actividades de la vida diaria. El efecto de luchar por
ese dogma es la
manifestación de diferentes piezas artísticas. Además de
ser una devoción heredada
por los
misioneros españoles, Guatemala
le ha dado su propio matiz
en sus tradiciones, arte y
cultura.
Fuentes:
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