Cuentos de Ciencia Ficción de Sociedad Edgar Allan Poe

Continuamos con la publicación de los textos ganadores del  Primer Concurso de Microrrelatos de Sociedad Edgar Allan Poe de Guatemala; en esta oportunidad los textos a compartir son los de Ciencia Ficción.

 Por Sociedad Edgar Allan Poe

Estado Mental por Anaís

Imagen decorativa: futurista digital dos personas roboticas

Me desperté sobresaltado, no sabía qué era lo que me había sacado de hibernación.

La nave está programada para despertarnos al llegar al destino.

Cuando detecte un mundo capaz de albergar a la humanidad, una nueva tierra.

Me acerqué a la cápsula más cercana.

Estaba vacía. Eso me sorprendió por lo que revisé las demás, todas estaban vacías.

Confundido interpelé a la terminal "¿Qué ha sucedido? ¿Y los demás?".

Una fría voz electrónica respondió: "Unidad E-5, sus memorias fueron selladas de forma voluntaria para proteger su estado mental".

Entonces los recuerdos reprimidos volvieron a mí.

Yo solamente soy un androide.

 

Este relato se llevó el primer lugar en la categoría de Ciencia Ficción.

 

La cicatríz queloide por Silvia Arteaga

Imagen con fines ilustrativos de una cicatríz queloide

La llevó en el cuerpo, recordando angustias.

Partida en dos, dio a luz una vida, desvaneciendo la suya.

Nunca le vio, solo le sentía cada noche y cada día.

La cicatriz queloide como testigo, en un universo violento, un ente nuevo, mitad hierro, mitad piel debatía días y noches entre lo malo y lo perverso.

Frente a frente están, el ente, detrás del vidrio observa sin sentir, ella, humana e inerte ve con ojos cerrados, siente con cuerpo frio, ama eternamente al ente que tiene por hijo.

Se despiden sin palabras, ambos absortos con la cicatriz queloide de la vida.

 

Este relato se llevó el segundo lugar en la categoría de Ciencia Ficción.

 

Lapsus por Noe Vasquez

Imagen decorativa inteligencia artificial


H tuvo otro episodio de ira. Cuando volvió en sí alguien caminaba junto a él.

A H se le hacía familiar este desconocido.

Después de quince minutos de su plática animada sobre corderos, H le interrumpió: «Disculpá… disculpá, ¿quién sos?»

«Empezamos», dijo el extraño con un suspiro.

«Me has llamado Zulleb, formaste mi cuerpo de carbón y vidrio policromo caliente.

Coqueteabas mientras me invocabas. Aparecí sudando, y me besaste.

Luego te acompañe a hacer cualquier cosa que quisiste. Entonces, sentiste miedo y corriste.

Esa es la versión corta. ¿Querés que te explique por qué no te gusta crear a Dios?».

Este relato se llevó el tercer lugar en la categoría de Ciencia Ficción.

Escudo Sociedad Edgar Allan Poe Guatemala


 

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